Cada año se producen casi 500.000 accidentes laborales en trabajos que implican el uso de las manos, muchos de los cuales están relacionados con cortes, a menudo con consecuencias irreversibles. Para proteger las manos en el trabajo, es fundamental utilizar EPI adaptados a la manipulación de herramientas y objetos afilados (cúteres, sierras circulares, trituradoras, motosierras, etc.). El guante de protección contra cortes actúa como una segunda piel protegiendo de este riesgo inherente a los sectores industrial y alimentario. Estos guantes contra cortes están diseñados con diferentes tipos de material (fibras sintéticas de alto rendimiento, filamentos metálicos, etc.) que proporcionan la máxima seguridad de las manos frente a cortes, abrasión y pinchazos. Los trabajos que conllevan la manipulación de cristal, madera, metal, residuos, etc., implican numerosos riesgos y requieren una óptima resistencia al corte.
Los pictogramas específicos indican el nivel de protección de cada par de guantes contra riesgos mecánicos. Deben cumplir las normas europeas. La norma EN 388 se aplica a los guantes de protección contra riesgos mecánicos. Existen varios tipos de resistencia a las agresiones mecánicas, entre ellos la resistencia al corte por cuchilla. Se atribuye un nivel de 1 a 5 en función del número de ciclos necesarios para cortar el guante sin una fuerza constante.
Para una protección eficaz contra los cortes en las manos, esta norma está evolucionando actualmente para convertirse en la norma ISO 13997. Esta norma mide la resistencia de los materiales utilizados en los guantes de protección contra cortes mediante un tomo dinamómetro (TDM). Cuanto mayor es el número de newtons, más resistente al corte es el guante de seguridad. Un marcado en el guante indica el nivel de rendimiento, clasificado de la A a la F.
Cada profesión o actividad requiere un tipo específico de guantes de protección contra cortes. La variedad de materiales utilizados en los guantes de protección permite que estos puedan adaptarse a diferentes tareas. Poda, tala de árboles, montaje de cerámica, recogida de vidrio, manipulación de papel y cartón, trabajos de precisión: las manos deben estar provistas de una protección individual adecuada, que garantice una gran comodidad y flexibilidad para una excelente destreza.
Al guante «clásico” resistente al corte que cumple con los requisitos generales, se añaden características adicionales como la resistencia al calor de contacto o radiante y a las proyecciones de metal fundido. Además, llevan incorporada una tecnología que los hace sensibles al tacto en dispositivos de pantalla táctil, sin necesidad de quitárselos.
Sin costuras, provistos de refuerzos, puños elásticos y de tallas adecuadas, los guantes resistentes al corte tienen un objetivo: una alta resistencia y total seguridad desde el puño hasta la punta de los dedos.